COMPETENCIAS PARA LA SOBREVIVENCIA EN ALGUNAS ESCUELAS MEXICANAS

Es permanente la reflexión sobre si la educación en México y en el mundo (en la casa o en la oficina como vitacilina) puede mejorarse inyectandole dinero o mejor dicho recursos materiales y financieros, sin embargo, la realidad -por encima de nuestras percepciones o experiencias- con frecuencia nos hace probar tierra. Si bien es cierto que es apasionante colgarse de la liana de la verdad para ponerse a salvo de los depredadores o de la naturaleza misma, también lo es que, mucho del mundo en que vivimos es construido por nosotros mismos, y en él los chamucos con los que nos espantamos. La invención debe cuidarse del pensamiento fantástico y de los atavismos de las tradiciones -en este caso académicas- cuando intentamos sostener verdades que se tambalean en las pantanosas zonas de los saberes de la educación. -¡hijole¡ advierto que es mejor callarme, pero también que me descalifican si me callo. así entonces le sigo-. Creo que debemos sospechar de qué tanto los alfileres sostienen el andamiaje de las realidades didacticas y entre ellas las de algunas certezas respecto de la efectividad de una o de otra, también de, la pureza de los procesos y resultados de la evaluación. ¿ a poco estamos seguros que- alguna vez siquiera alguna por indeterminada que sea- nuestros instrumentos son lo que dicen ser para medir los que decimos intentamos medir?, y si así fuera ¿cuál es el peso de los argumentos que demuestran tanta carga epistemológica?
Parece que preguntar es tan fácIl como juzgar. El asunto es que, desde algun punto de la vista, podamos juntos aquí compartir, debatir, argumentar y comprender cómo la realidad educativa nos convoca, nos provoca a seguir empeñando nuestro compromiso por abrir un "coyol" o cómo "inspirar los sueños" de quienes han perdido la esperanza ante una realidad social exasperante. Hoy día muchos estudiantes que honestamente quieren aprender renuncian a sus espectativas academicas cuando pasan innumerables tribulaciones, pues las tribus grupales establecen feudos de control de lo que ha de ocurrir en la clase, desde los feudos de la influencia social, hasta los feudos estamentales derivados de la clase social de los padres ya sea petroleros o del mismo gremio magisterial, que heredan mecanismos de gestión de las calificaciones o simplemente por la via de las relaciones interpersonales establecen una estructura grupal modelada por su estatus socioeconomico.
Con lo anterior cabe decir que hay, existe un otro mundo contiguo o paralelo que no es fantasmagórico y que no podemos controlar desde la didáctica, es entonces que una pedagogía debe alumbrar desde sus principios el camino a seguir. El cual por cierto no está a la vuelta de la esquina, sin embargo se encuentra en nuestro interior y como tal, uno no se lo puede imponer al otro, debe ser decubierto, desvelado a partir de reconocernos y aceptarnos como somos en lo que somos cuando somos. Somos docentes o profesores, esta es nuestra profesión, muy lejos de ser dueños de la verdad y muy cerca de la necesidad de resolver los problemas de nuestro entorno, creo más con buenas acciones e intenciones, pero también con humildad y mucho trabajo.