LOS CUENTOS DE LA EDUCACIÓN 5
Hoy día parece haber una gran confusión acerca de la función de la escuelas. Tal confusión radica en el concepto que genéricamente se usa para nombrar algún proceso social relacionado con el aprendizaje o la enseñanza. Al respecto hay que afirmar que ni la escuela ni el profesor son los dueños del monopolio de la enseñanza y el aprendizaje. Por ejemplo si un sujeto no se escolariza no por ello se encuentra privado de aprender ni de ser enseñado. En esto además hay que afirmar que nadie puede privar a otro de aprender o de enseñar, de modo que todos enseñamos y todos aprendemos. En el peor de los casos un sujeto encarcelado y aislado aprende de sí mismo y de la situación de coacción en la que se encuentra, de aquí podemos afirmar que no se le puede privar de aprender, por lo tanto ningún sujeto puede ser privado de aprender y que el aprendizaje no se puede privatizar. No así la enseñanza, pues por su misma naturaleza social requiere de dos sujetos para darse, el sujeto aislado no puede ser enseñado. De todo esto pueden derivarse algunas premisas:
No todo aprendizaje resulta de la enseñanza
No toda enseñanza resulta en aprendizaje
No toda escolarización es educativa
No toda educación es escolarizada
No todo aprendizaje es educativo
No todo lo educativo es escolarizado
No todo aprendizaje resulta de la enseñanza
No toda enseñanza resulta en aprendizaje
No toda escolarización es educativa
No toda educación es escolarizada
No todo aprendizaje es educativo
No todo lo educativo es escolarizado
En Brasil, a los reos se les puede reducir días de cárcel sí leen un libro y escriben un ensayo formal al respecto, los temas son de ciencias, filosofía, etc. Los reos lo hacen quizá por el afán de reducir su sentencia, pero es probable que en proceso salgan amantes de las ciencias y la filosofía. Pero de manera independiente ¿que se necesita para que un individuo tenga el afán de aprender por sí mismo? Los tan llamado autodidactas, como por ejemplo Howard Hughes, que realizó famosas películas, fue empresario y revolucionó la aviación ¿Cómo es posible esto último sin que el estudiara aviación? Claramente Howard Hughes era un entusiasta de la aviación, y el no estudiar ingenieria aeronautica no le impidió lograr sus metas. Hay
ResponderEliminarquienes dirán que quizá era un genio nato, pero yo no lo creo, creo más bien que él
logro captar toda su atención y empeño a un tema de su interés, creo que eso es todo
Hoy en día ya no es excusa que no se pueda aprender algo por no ir a la escuela o no tener clases por ´´x´´ o ´´y´´ razón , con tanto contenido en interner y bibliotecas públicas, lo único que hace falta es iniciativa.
ResponderEliminargracias Fabricio tu comentario contribuye a entender mejor la idea
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